Río Experiencias: La mágia de la lectura

La mágia de la lectura

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Seño Ecarni y su grupo 4 años A, en el Rincón Cervantino del hall

Cervantes nos va a acompañar hasta el final del curso escolar, pues el alumnado está tomando especial cariño a todo y cada uno de sus personajes. Por lo que considero que ya esta obra, su autor y personajes han calado hondo en los corazones de los pequeñ@ y ahí van a permanecer y todo gracias la mágia de la lectura.

Nuestra finalidad es acercar a nuestras nias y niños la figura de Miguel de Cervantes y su obra, realizando para ello una serie de actividades en nuestro Rincón Cervantino del Hall, lugar decorado con motivos cervantinos para este fin.

Los viernes tras realizar la Asamblea en clase, tenemos en nuestro plan de actividades de aula, un momento del horario dedicado a la lectura conjunta. Es un momento emocionalmente educativo, a veces nos hemos salido todos junt@s a leer al aire libre un cuento abajo en el patio, leemos un cuento y lo representamos, leemos un cuento por parejas...

El marco hoy : Rincón Cervantino del Hall

Hemos repasado los hechos más representativos de El Quijote y hemos seleccionado un capítulo ( el número 8) para volver a leerlo. Recordando donde vivía Alonso Quijano, dónde y qué leía, qué le decía su sobrina, quiénes eran sus amigos y quién era Sancho; cómo lo nombraron caballero, cómo era su caballo y su perro...
Para terminar la actividad de hoy, hemos realizado unos Puntos de Lectura con motivos cervantinos por una cara y por detrás el nombre y apellidos de Miguel de Cervantes Saavedra, escrito por cada uno de los niños y niñas para llevar a casa o guardar en su dossier.

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Encarni Barragán

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invitación a pensar

¿El pájaro está vivo? El joven estaba concluyendo su periodo de preparación, y muy pronto pasaría a enseñar. Como todo buen alumno, necesitaba desafiar a su profesor, y desarrollar su propia manera de pensar. Así que capturó un pájaro, lo agarró con una mano, y lo llevó hasta él: -Maestro: ¿este pájaro está vivo o muerto? Su plan era el siguiente: si el maestro dijera “muerto”, él abriría la mano y el pájaro se echaría a volar. Si la respuesta fuese “vivo”, él lo aplastaría entre los dedos. De esa manera, el maestro siempre estaría equivocado. -Maestro, ¿el pájaro está vivo o muerto? – insiste. -Mi querido alumno, esto va a depender de ti – es el comentario del maestro. Pablo Coelho.