Río Experiencias

Escribir y leer textos desde el nombre, un título, un cuento... y expresiones matemáticas como las cantidades, los números, los planos... nos son útiles para la vida. 

Los materiales que tenemos en el aula, en nuestras manos también son útiles, pero además son necesarios interesantes y emocionantes. Estos materiales están en diferentes momentos de nuestra jornada escolar. La lectura, la escritura y las matemáticas se llenan de emoción y donde hay emoción hay aprendizaje y esos materiales se transforman en saberes escolares, partiendo de lo cotidiano como punto cíclico siempre. 

Los números , la escritura, los textos,... están presenten en el aula de la misma manera que están presentes en la vida. Las matemáticas y el lenguaje escrito se construyen a partir de una necesidad, de un conflicto cognitivo, de una pregunta,... produciéndose por adaptación al medio y por acomodación, como dice Blanca Aguílar por progresivas reestructuraciones cognitivas a los códigos de la comunidad. Por tanto, el error es fuente de aprendizaje.

Cuando nuestro alumnado usa conceptos numéricos debe servirles para darle respuesta a una situación presentada en la vida y para hacerles esa vida más fácil y más feliz. Dicho esto, paso a explicar brevemente nuestra situación problemática de aula y como le damos solución entre todas y todos. 

La Seño Encarni ha llevado a clase cuatro bandejas nuevas que ha comprado pero "No sabe" ( esto es importante, hacerles ver que tú no sabes como repartir el material) repartir el material que tenemos en la clase de : rotuladores gruesos, rotuladores finos, ceras final, ceras gruesas, gomas de borrar, lápices de escribir, sacapuntas... Es la primera vez que he realizado con este grupo una situación de matemáticas asi, con grupos anteriores estaban muy acostumbrad@s a hacerlas.

Hemos comenzado por poner todo el material en la mesa. Hemos ubicado una bandeja para cada mesa y para diferenciarla les hemos puesto pegatinas del color de cada mesa. Luego hemos contado cuantos niños y niñas hay en esa mesa y hemos cogido y separado un lápiz de escribir para cada uno/a. Los hemos agrupado para no equivocarnos.  Y hemos colocado una goma para cada grupo, es decir, para cada mesa. 

Contamos los lápices de cada grupo

Luego hemos repartido los rotuladores finos, a continuación los rotuladores gordos y con éstos nos hemos dado cuenta que si los ponemos en el espacio más largo y ubicamos uno frente a otros pues se pueden poner más rotuladores. Hemos puesto también las ceras gordas, hemos puesto un sacapuntas para cada grupo, luego hemos pensado que sería poco y hemos puesto otro sacapuntas... asi hemos ido repartiendo casi todo el material que teníamos, hasta que hemos visto que nos sobraba material, entonces lo hemos dejado a un lado para reponerlo cuando sea necesario.

Usamos las matemáticas para gestionar nuestra vida y construimos continuamente conocimiento, comparando medidas, formas, tamaños.. y verbalizandolo. Esa construcción del conocimiento que se transfiere a otras situaciones hacen que obtengamos o negociemos códigos, estrategias de resolución y significados, todo con la finalidad de interpretar o representación matemática como hemos hecho en esta actividad, es decir, la hemos recogido por escrito.
Nos hemos dado cuenta también y ya para finalizar que un niño o niña solo, lleva con dificultad la bandeja a la mesa porque ésta pesa mucho. Es necesario que la lleven a la mesa entre dos, así el peso es menor, se reparte, es más fácil y no se les cae. Si para ello hay que pedir ayuda pues también tenemos que saber tanto pedir ayuda como prestar esa ayuda. ¡ Asi es la vida en un aula de infantil!