El sillón de los abrazos en el rincón de las emociones

Poli, abuela de Sam recibiendo abrazos en el Sillón

El sillón de los abrazos de nuestra clase es la silla de la Seño. Nos vimos en la necesidad de tener un Sillón de los Abrazos grande y fuerte. Recordemos...
Usualmente suelen venir a clase abuelos y abuelas, madres y padres o expert@s en alguna materia. Vienen al aula a leernos o contarnos un cuento, pueden venir a realizar algún taller, a traernos un recuerdo de su infancia con el que aprendamos una emocionante lección...

Cuando esa persona termina la actividad pues nos gusta ser Agradecidas y Agradecidos. Nuestra Seño dice que ser agradecid@s engrandece a la persona y que a ella, le enseñó su abuelo cuando era muy pequeña. Es una enseñanza de gran valor. 

Nosotros entonces somos agradecidos con la persona que ha venido al aula, a dedicarnos su tiempo, su esfuerzo, su conocimiento, su recuerdo... y por eso, le solemos preparar un recuerdo , puede ser un  Corazoncito con un mensaje detrás, o un punto de lectura de nuestro centro,... para que un niño o niña se lo entregue en nombre del grupo y le de las Gracias. 

Pero claro, no hemos terminado aún y es que siempre solemos dar abrazos y besos, por lo que hemos comprobado, que si la persona que viene, se sienta en una silla pequeña de las nuestras, cuando vamos a abrazarle para despedirnos, por mucho cuidado que tenemos, siempre lo tiramos al suelo o contra la pared. 

Entonces, pensamos y hablamos en una Asamblea de clase y decidimos buscar una Silla grande para que esa persona se sentara a recibir los abrazos y ¡ asi lo hicimos!. La silla más grande era la de la Seño y como claro, lo que hay en la clase es de todos y todas pues pusimos un cartel que hicimos en el ordenador para nombrar la Silla de la Seño y llamarla "Sillón de los Abrazos". 

De esta forma, la persona se podía sentar y nosotr@s podíamos  abrazarla con seguridad. 

Con esta actividad trabajamos el Agradecimiento y el Amor.  Expresamos nuestras muestras de cariño y podemos usarla también en el aula cuando sintamos la necesidad de recibir cariño. Por ejemplo, cuando nos sintamos cansados, cuando estemos tristes, cuando tengamos alguna rabieta o sencillamente cuando queramos sentir calma.

Animo desde este humilde espacio, a tod@s los docentes a reservar un espacio para poner una silla así. Es una actividad que puede estar incluida dentro del Rincón de las Emociones, como es el caso de nuestra clase. ¡ Y a abrazarnos fuerte !