Nerea Añel Vazquez, mujer asesinada por violencia machista.

 

Nerea ya no tiene voz, nosotras somos su voz.

Nerea Añel Vazquez es una de las treinta y siete mujeres y cinco niñ@s asesinadas por violencia de género. Tenía 26 años y era de Ourense. Su nombre estaba hoy en una de las plantas, concretamente la que me han entregado Manuela, técnica del Área de Igualdad de Motril.

 

Ha sido en el acto del Área de Igualdad del Ayuntamiento de Motril, en la mañana de hoy con motivo del Día Internacional contra la violencia hacia la mujer.

Hemos ido colocando cada una de las plantas, en la Placa conmemorativa a las víctimas de violencia de género, situ en el precioso Parque de los pueblos de las Américas. Ha sido un sentido y emotivo homenaje a las victimas de violencia de género y para ello, hemos ido colocándolas en el suelo, con sumo respeto y cariño, porque cada una de ellas es una mujer asesinada en manos de su pareja o expareja.

Este año, la campaña ha ido destinada a los hijos e hijas víctimas de esta violencia, con el objetivo de poner nuestra mirada en sus necesidades y disponer de todos los recursos para su protección.

Desde el colegio trabajamos hoy y siempre para prevenir cualquier tipo de violencia, pero en especial esta lacra social. Motril entero se une contra la violencia de género.

En este acto, ha habido diferentes actividades en donde han participado tanto alumnado de distintos Institutos y colegios del municipio, se ha dado lectura de poemas, ... todos los años y en la medida de nuestras posibilidades, desde la E. E. I. "Río Ebro " y desde la Coordinación del Plan de Igualdad hemos estado presentes y queremos seguir estando presentes, creando puentes y alianzas para erradicar esta lacra social.

Terminado el acto, me despedí y me dispuse a volver al colegio a paso rápido para no tardar mucho en llegar. Venía muy emocionada y pensando ¿ Quién sería Nerea ?. Tener esa planta entre mis manos y leer el nombre de una mujer me ha hecho pensar. Pensar si habría dejado hijos/as, pensar si la mató su pareja, su expareja, pensar cómo murió, cuánto sufrió,... mis pasos se relentizaron porque observé que llevaba los ojos llenos de lágrimas, prontos a brotar y entonces tuve que parar, quitarme la mascarilla y respirar. Dejar que las lágrimas salieran y afianzarme una vez más en mi compromiso con la defensa de los Derechos de las Mujeres. 

El Parque de los Pueblos de las Américas está precioso después de la remodelación, lleno de vida, de color y vida. Vida es lo que le arrebataron a Nerea. Ni una más, sigamos trabajando para que no haya ni una más.