Un abuelo, un recuerdo.

Aquilino es el abuelo de Javier y nos ha visitado hoy

 Desde la coordinación del I Plan de Igualdad entre hombres y mujeres, se ha planteado una serie de actividades para celebrar el Día de la Infancia en próximo 20 de Noviembre.
Invitar a un abuelo o abuela a clase para contarnos un Recuerdo de su infancia, hablarnos sobre sus juegos, sobre su familia,... era una de las actividades.

Aquilino nos cuenta cómo era su infancia

Las palabras finales a modo de agradecimiento de Aquilino (abuelo de Javier), podrían ser las iniciales de esta entrada. Nos ha dicho que abramos la escuela a los abuelos y que los invitemos más, que se ha sentido muy agustito y le hemos hecho muy feliz .

Sentados en la Asamblea escuchamos al abuelo

 Aquilino Bautista Guitierrez es el abuelo de Javier. Ha trabajado 4 años en Caja Granada y ahora está prejubilado, disfrutando de su tiempo principalmente con su familia y en especial a sus nietos. Los niños y niñas le conocen de traer y recoger algún día a Javier del cole. En la mañana  ha dedicado su tiempo  a contarnos cómo era su Infancia.
Javier ha presentado a su abuelo y desde el inicio se palpaba una complicidad que sólo entre abuelo y nieto puede existir.

El abuelo ha comenzado con gran templanza a contarnos cómo era su escuela de la infancia. Una escuela situada en la parte baja de un edificio del cercano pueblo de Velez Benaudalla, en donde las paredes no estaban tan decoradas como las de aqui, su maestra era una señora mayor, muy trabajadora pero que no solía sonreir mucho. Era otros tiempos...

 Ha comentado también cómo va cambiando la enseñanza, desde esos tiempos, pasando por los de sus hijos y ahora lo que está viviendo con sus nietos.
Desde el inicio nos ha transportado a su mundo de la infancia, sólo con sus palabras. Hemos podido casi ver a su madre, que tenía una panadería y cómo la gente solía ir a diario, pero sobre todo en fechas cercanas a la Navidad, en la que se solían hacer dulces especiales todas las vecinas del pueblo  ¡ Os aseguro que se podía oler a pan de leña recién hecho en clase!

El abrazo final como agradecimiento

 Él era un chico algo rellenito porque le gustaba mucho comer.
 Me quedo absolutamente con todas y cada una de las palabras del abuelo Aquilino, pero sobre todo cuando nos ha hablado del valor del Respeto, poniéndonos un claro y real ejemplo de cuando era niño.

Nuestro agradecimiento en forma de estrellita para el abuelo Aquilino

Lo que más ha gustado al grupo ha sido cuando ha hablado del campo y de Javier. Suelen irse al campo donde tienen hecha una casita en un árbol y plantas frutales. Allí pasa muy  buenos ratos con sus nietos. ¡ Es un lujo tener un abuelo asi!
Después de la experiencia del abuelo, los niños y niñas de la clase le han comentado aquello que les ha gustado ás y lo que han aprendido. También le han preguntado ¿cómo se ha sentido él en nuestra clase?