Este cuento tiene como protagonista a Tonelillo, un pequeño tonel que enferma cuando comienza a quedarse
vacío y deja de cumplir con su función primordial: hacer vino.
Subyacen en esta historia un sinfín de situaciones análogas perfectamente
identificables en la vida real, con las que la autora pretende transmitir la
importancia de la voluntad, la autoestima, el trabajo en equipo, la dedicación
y la empatía en momentos críticos, llevándonos a una moraleja clara y esencial:
la capacidad intrínseca de cada cual para adaptarse a situaciones nuevas,
complejas o delicadas, haciendo uso de la inteligencia emocional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario