La primera opción profesional de los finlandeses es la del profesorado. Ser maestro implica gran prestigio y reconocimiento sociales, por lo que la mayoría de sus estudiantes, y los más dotados entre ellos, tratan de acceder a sus escuelas de magisterio, algo que sólo una pequeña parte consigue.
El sistema educativo del país nórdico, que aparece sistemáticamente entre los mejores del mundo en los informes PISA, ha convertido al docente en el núcleo de una apuesta educativa de grandes dimensiones. Finlandia carece de recursos naturales, por lo que la supervivencia económica de la nación depende en gran medida de la cualificación profesional de sus habitantes. Conscientes de la situación, los gobernantes escandinavos decidieron décadas atrás que, para situarse en lo más alto del ranking educativo, no sólo habían de contar con los medios y los métodos adecuados, sino que debían poner al frente a las personas más valiosas. Por eso, asegura Eeva Sippola, agregada del Instituto Cultural Iberoamericano de Finlandia, sólo eligen como futuros docentes a los estudiantes más capacitados: si la educación es lo más importante, tendrán que ser las personas más preparadas las que impartan docencia.
Yo tambien creo que la docencia tiene que ser vocacional, es tan importante poder instruir pequeños genios...pero es muy importante tambien hacerlo con alegría, disfrutando en cada momento, buscando recursos, de otra forma dicho involucrándose. Y eso sólo se logra si realmente te gusta tu trabajo. Por eso nos gustas tanto "Seño" Se ve que lo llevas en la sangre...Bsss
ResponderEliminarSe nota quien cree en lo que hace y tenemos suerte de tener a Encarni como la "portadora de la primera llama" que guiará a nuestros hijos en la olímpica vida que les espera. Gracias.
ResponderEliminarMil gracias.- Qué palabras más bonitas.-
ResponderEliminarOs voy a contar un secreto a voces: desde siempre he tenido claro que quería ser "maestra de niños pequeños", aprendí a leer, a escribir, terminé EGB y esa era siempre mi idea. Para mi es una forma de vida y desde luego esa vocación se siente como una sensación o sentimieto, es totalmente real.- Gracias.