Creo en la educación, en las escuela, en las familias, en la Comunidad Educativa. El mundo será mejor si realizamos actos de amor como este.
Estamos educando niños y niñas emocionalmente inteligentes. Actualmente responden con cariño, ternura y respeto hacia los animales. Confio que hoy adquieran competencias para que el día de mañana actúen aún mejor. Sé que tendrán comportamientos tan humanamente sensibles y emotivas como la de este chico.
Deseo contaros la historia del abandono de una preciosa cachorra de dos meses, un abandono que por ser tal, no tiene por que ser triste y no lo es. Gracias a la bondad de un chico joven motrileño llamado Ikañi, que se la encontró y su corazón no pudo mirar hacia otro lado. Se preocupó y ocupó de ella, acogiéndola en sus brazos y buscando sin cesar un Refugio comprometido y competente que se encargada de esta vida.
Iñaki estudió en el Colegio Motrileño Garvayo Dinelli y después en el IES Francisco Javier de Burgos. La educación por el respeto hacia los animales da sus frutos. Como docentes educamos teniendo compromisos con nuestro alumnado y sus familias, pero también con la sociedad, la naturaleza... nada se desliga, va todo unido, globalizado como decimos pedagogicamente.
Cuando contacte con este chico, percibí su sensibilidad, se mostraba educado y respetuoso en su forma de dirigirse a mí. A mí mente vinieron muchas ideas , ese chico habrá sido educado en una buena familia, habrá ido a un colegio, a un aula, con un maestro o maestra que le haya inculcado, sin lugar a duda, el respeto y cariño hacia los animales, le dio recursos humanos para cuando se encontrara en una situación en la que la toma de decisiones fuera importante , en definitiva, le hizo ser una buena persona.
El legado de ese maestro, maestra quedó ahí, como hoy siguen haciéndolo maestros y maestras en tantas escuelas y colegios. Ese germen, ha dado sus frutos cuando este chico ha encontrado recientemente en una noche fría y lluviosa a esta perrita y ha querido ayudarla. Ha sido noble, generoso, bondadoso y se ha apiadado de ella.
Creo que un mundo mejor es posible, haciendo actos de amor como este .
Esta entrada va dedicada a Iñaki, al Colegio Garvayo Dinelli, IES Fº Javier de Burgos, al Refugio de Julia y a todo su voluntariado ¡ Mil gracias!
